Con Información de Univisión
Entre polémicas, Brady vuelve a enfrentar a su primer rival del Super Bowl.
El Super Bowl LIII entre los New England Patriots y los Rams de Los Angeles es una revancha del Super Bowl XXXVI, el primero de Tom Brady.
Diecisiete años después, Tom Brady y los New England Patriots volverán a enfrentar a los Rams, en una reedición del Super Bowl que encumbró a la franquicia como la más dominante del Siglo XXI.
Aquella vez, los Patriots vencieron a los Rams, entonces de St. Louis por 20-17, con un gol de campo de 48 segundos de Adam Vinatieri con solo siete segundos en el reloj que apagó la remontada de los Rams, que se recuperaron de una desventaja de 14 puntos en el último cuarto.
Diecisiete años después, Tom Brady y los New England Patriots volverán a enfrentar a los Rams, en una reedición del Super Bowl que encumbró a la franquicia como la más dominante del Siglo XXI.
Aquella vez, los Patriots vencieron a los Rams, entonces de St. Louis por 20-17, con un gol de campo de 48 segundos de Adam Vinatieri con solo siete segundos en el reloj que apagó la remontada de los Rams, que se recuperaron de una desventaja de 14 puntos en el último cuarto.
Desde entonces, los Rams no habían vuelto al partido por el título de la NFL, mientras que los Patriots están en su novena aparición en este siglo y décima en total.
Los cinco títulos de New England no dan pie a debate sobre cuál es la mejor franquicia de las últimas dos décadas, pero un nutrido grupo de detractores de los Patriots han tomado suficientes armas con decisiones polémicas de arbitraje que les permitieron avanzar en diferentes ocasiones.
Tanto para Rams como para Patriots, hubo madera de donde cortar, especialmente si pensamos que es la primera vez en la historia que ambas Finales de Conferencia se fueron a tiempo extra.
En New Orleans, con los Saints a punto de anotar, no se marcó una clara interferencia de pase de Nickell Robey-Coleman a Tommylee Lewis que le evitó la posibilidad de un eventual touchdown que pudo definir el partido.
En Kansas City, un acoso al pasador sobre Brady fue marcado sin sustento reglamentario y se mantuvo como completo un pase en el que, aparentemente, Chris Hogan no tuvo control.
Ambas acciones permitieron continuar una ofensiva que terminó en anotación para los Patriots para el 24-21 parcial.
El “hubiera” no existe, dicen, pero la polémica dejó heridas abiertas en los corazones de Kansas City y New Orleans.
Lo que sí podemos asegurar es esto: el Super Bowl LIII enfrentará al mejor coach en la historia de la NFL ante el más joven en esta instancia y al quarterback más ganador contra uno de los más grandes valores jóvenes en esa posición.
En Atlanta sabremos el 3 de febrero por la noche si la Liga verá definitivamente el recambio generacional o si se cierra un ciclo para el más ganador de todos.